Alerta Bullying en Bandera, 7 de cada 10 niñas, niños y adolescentes en nuestro país reciben maltrato en los entornos educativos

Un reciente estudio, de carácter internacional, realizado por la ONG Bullying sin Fronteras detectó que 7 de cada 10 niñas, niños y adolescentes en nuestro país son víctimas de acoso escolar, tras haber recibido algún tipo de maltrato en los entornos educativos.
La ciudad de Bandera no es la excepción, a pesar de ser una pequeña localidad, las denuncias de bullying por partes de los padres es reiterada. Son varias las instituciones educativas donde suceden casos de violencia y burlas por partes de los alumnos. En colegios secundarios y en escuelas primarias ya se registraron denuncias de violencia y burlas, al punto que esto es tema de debate en la comunidad bandereña.
Periódico Sur Santiagueño recibió varias comunicaciones de padres de diferentes instituciones educativas, donde explicaron que es recurrente hacer sentir mal, incómoda, amenazada, a alumnos, sin poder llegar a defenderse. Son varias las intuiciones educativas que tienen este problema sin solución aparente por parte de las autoridades de las escuelas y colegios. Y la clara preocupación de los padres antes estos hechos de discriminación.
De acuerdo con las estadísticas brindadas por esta investigación, entre enero de 2021 y marzo de 2022 Argentina se posicionó como uno de los países en el mundo con más casos de acoso escolar y ciberacoso. 14.800 situaciones en el último año, lo cual implica un aumento del 20% con respecto al último informe donde se habían totalizado 12.300 casos.
Concretamente, el acoso escolar (bullying) corresponde a una serie de conductas que infringen daños a niñas, niños y adolescentes en espacios escolares. Quienes lo padecen van desde los 4 a 18 años. Esto, se agrava cuando se presentan en los entornos virtuales y las redes sociales.
Las víctimas de bullying pueden sufrir abusos físicos o psicológicos, de manera reiterada y provocadas intencionalmente por una persona o un grupo, ocasionando problemas de salud y prácticas autodestructivas, a través de conductas como golpes, empujones, agresiones verbales, amenazas, humillaciones en público, abusos sexuales y ciberacoso.
La preocupación por esta problemática en los establecimientos educativos y en las redes sociales se agrava cuando las víctimas deben ser atendidas en hospitales o clínicas, recurrir a tratamientos psiquiátricos y psicológicos, asistir a dependencias policiales para que intervengan en los hechos.
Sin embargo, aunque estas situaciones de acoso escolar se observen en mayor medida en las grandes ciudades, las localidades del interior provincial no permanecen ajenas a esta problemática.
Fuente: sursantiago.com.ar